Al día siguiente por la mañana, agentes forestales y técnicos de la compañía eléctrica acudían a la zona para realizar las labores oportunas. Tras ver la torre, un técnico de Iberdrola equipado adecuadamente procedió a bajar el animal y pudimos comprobar que llevaba varios días ahí. Los agentes forestales realizaron el acta correspondiente y se encargaron del cadáver. Como hemos comentado en otras ocasiones, la electrocución es una de las principales causas de mortalidad de algunas rapaces como, en este caso, el búho real.