Estos pollos, después de pasar unos días en las criadoras, serán devueltos a las parejas de cría y posteriormente se liberarán mediante “hacking” en la numerosa red de primillares con la que cuenta GREFA, para así reforzar las colonias de esta especie amenazada en nuestro país. GREFA es ahora mismo el centro europeo donde más cernícalos primilla se producen anualmente: un magnífico indicador de los resultados obtenidos por nuestro departamento de cría en cautividad.