Como la hembra presentaba una fuerte lesión en un ala que no le permite subir al nido que le hemos preparado dentro de su nueva instalación, decidimos hacerle una plataforma más baja a la que se puede subir fácilmente por una rampa de acceso. Desde ese nivel hemos colocado una segunda rampa de acceso al nido más alto. La pareja ha reaccionado muy bien una vez que han sido depositados en su nueva instalación, interaccionando rápidamente entre ellos y colocando ramas en el nuevo nido que disponen para intentar (aunque con pocas posibilidades para este año) reproducirse.

Los dos ejemplares de la nueva pareja descansan sobre su nido en las instalaciones de GREFA. Los constructores posan junto al nuevo nido

Con esta nueva pareja incorporada, el proyecto de GREFA dedicado a la cría en cautividad del buitre negro aborda una nueva temporada reproductora con dos parejas que ya han criado con éxito en temporadas anteriores, además de otras dos de nueva formación (incluida la cordobesa) que esperamos consigan reproducirse con éxito en el futuro. Los pollos nacidos de estas parejas se destinan a proyectos que pretenden al reforzamiento y ampliación de la población del buitre negro en Europa, como el que se desarrolla actualmente en Pirineos (Boumort-Alinyà).

La pareja de buitres negros cedidos por la Junta de Andalucía en su nueva instalación La pareja de buitres negros cordobeses en su nueva casa