Varios buitres negros reintroducidos en la Sierra de la Demanda, en un punto de alimentación (PAE).Varios buitres negros reintroducidos en la Sierra de la Demanda, en un punto de alimentación (PAE).

El pasado 16 de enero, el equipo del Proyecto Monachus de GREFA, dedicado a la recuperación del buitre negro, se reunió en Barbadillo del Pez (Burgos) para evaluar los resultados de sus actuaciones y planificar acciones de cara al 2020. El encuentro tuvo lugar en plena Sierra de la Demanda, donde el Proyecto Monachus trabaja desde hace cuatro años para fundar una población reproductora de buitre negro, a imagen y semejanza de la ya creada en el Prepirineo catalán.

La parte más visible y conocida de todo proyecto de reintroducción es sin duda la que tienen que ver con el manejo de los animales liberados y su seguimiento en el campo. Pero para lograr la fijación de los ejemplares reintroducidos en el medio natural donde se pretende recuperar sus poblaciones es necesario contar con un equipo multidisciplinar que pueda abordar e integrar las diferentes líneas de trabajo de un proyecto de estas características. Por eso no es casualidad que profesionales de las más diversas especialidades coincidan en el Proyecto Monachus de GREFA, compuesto a fecha de hoy por unas 25 personas.

Pensemos que para obtener los buitres negros que luego liberamos en las zonas de reintroducción, la mayor parte de los cuales provienen de centros españoles de recuperación de animales salvajes, se requiere la labor sanitaria de los veterinarios para el tratamiento y recuperación definitiva de estos ejemplares en el hospital de fauna de GREFA (Majadahonda, Madrid). También es vital la labor de los rehabilitadores de fauna, cuya función es devolver las condiciones óptimas al ave para su puesta en libertad.

Una porción de los buitres negros liberados proviene de cría en cautividad. Aquí es donde intervienen los dos técnicos que establecen los protocolos de emparejamiento y mantenimiento de las cinco parejas de esta rapaz necrófaga que en 2019 componían el "stock" reproductor del Centro de Cría en Cautividad de Especies Amenazadas de GREFA. Por cierto, este año el plan de cría en cautividad del buitre negro de GREFA se ha iniciado con dos parejas más.

Los técnicos de campo se encargan "in situ" del mantenimiento de los buitres negros en la jaula de aclimatación una vez son trasladados a la zona de reintroducción, como ocurre actualmente en Huerta de Arriba (Burgos), así como del posterior seguimiento en el campo tras la liberación de los ejemplares reintroducidos, labor que también se lleva a cabo en la colonia prepirenaica de la especie creada en Boumort (Lleida). Otra labor muy importante de estos técnicos de campo es la de implantar las diferentes medidas de fijación de buitres negros en el territorio como son la gestión de Puntos de Alimentación Específica, la colocación de nidos artificiales y el contacto con los entes locales.

Miembros del Proyecto Monachus de GREFA, en el local de Barbadillo del Pez (Burgos) donde celebraron su reunión de evaluación.Miembros del Proyecto Monachus de GREFA, en el local de Barbadillo del Pez (Burgos) donde celebraron su reunión de evaluación.

Educación ambiental y comunicación

La educación ambiental y la sensibilización social es un pilar básico en todo proyecto de conservación y de ello se encarga el equipo de educadores que, desde el Centro de Educación Ambiental “Naturaleza Viva” de GREFA, transmiten a los más jóvenes escolares los avances y resultados del Proyecto Monachus, así como la importantísima función del buitre negro y otras rapaces necrófacas en el ecosistema.

Mientras tanto, la gestión de los datos telemétricos, bases de datos e informatización de la información obtenida en el campo es realizada por el técnico informático de GREFA, que pone así a disposición del personal técnico del proyecto los movimientos de lo buitres negros reintroducidos, que portan emisores GPS para dar cuenta de sus desplazamientos. Un proyecto "no existe" si no se da a conocer, por lo que desde el departamento de comunicación de GREFA se difunden regularmente los avances del proyecto hacia un amplio espectro de población a través de las redes sociales y webs.

Todas estas acciones se asientan sobre la administración y dirección del proyecto, que marcan los tiempos y establecen las directrices básicas.

Ambiente muy fructífero

La sinergia entre profesionales y el entramado de trabajos sobre los que se sustenta el Proyecto Monachus, iniciado hace más de diez años en el Prepirineo catalán y más recientemente en la Sierra de la Demanda, fue evaluado con detalle en la reciente reunión de Barbadillo de Pez. El encuentro se desarrolló en un ambiente muy fructífero y nos permitió valorar la marcha del proyecto de forma muy positiva.

Durante la reunión se recordó que en el Prepirineo catalán se ha alcanzado en 2019 la cifra récord de 66 buitres negros residentes y unas veinte parejas formadas, en una población reintroducida en la que ha nacido casi medio centenar de pollos desde 2010. Mientras tanto, la incipiente colonia de la especie en la Sierra de la Demanda, en poco más de dos años desde la primera liberación, se compone ya de 39 ejemplares y nueve parejas formadas, varias de las cuales se encuentran regentando nidos, por lo que todo parece apuntar a que este año lograremos la primera reproducción de buitre negro en esta zona.

Foto de grupo del Equipo Monachus de GREFA, dedicado a la recuperación del buitre negro, junto a un cartel del proyecto.Foto de grupo del Equipo Monachus de GREFA, dedicado a la recuperación del buitre negro, junto a un cartel del proyecto.