Uno de los buitres negros marcados en Alinya, con el emisor GPS visible, despliega sus alas en el jaulón de aclimatación.Uno de los buitres negros marcados en Alinya, con el emisor GPS visible, despliega sus alas en el jaulón de aclimatación.Ya queda menos para la suelta definitiva de los seis buitres negros que llevan varios meses aclimatándose para ello en el jaulón para la especie existente en la zona de reintroducción de Alinyà, en el Prepirineo catalán, bajo gestión de la la Fundació Catalunya-la Pedrera. El pasado 10 de mayo se llevó a cabo el último protocolo necesario: el marcaje con emisores de estas aves. Alinyá es uno de los puntos de liberación de buitres negros del proyecto de reintroducción de la especie en Cataluña, junto con la reserva también prepirenaica de Boumort.

Cinco de esos buitres negros proceden del Hospital de Fauna Salvaje de GREFA, donde terminaron su proceso de recuperación para su posterior aclimatación y suelta. Dos de estos cinco ejemplares habían ingresado en su día directamente en las instalaciones de GREFA, otros dos fueron cedidos por el centro de recuperación de fauna de "El Chaparrillo", en Ciudad Real, y uno más procedía del centro de recuperación de fauna de los Los Villares, en Córdoba. Un sexto buitre negro fue encontrado como pollo, desnutrido, en la propia zona de Alinyà al final del verano 2015, por lo que fue incorporado a la jaula de aclimatación allí existente, después de ser atendido en el centro de recuperación de fauna de Torreferrusa (Barcelona).

Los seis buitres han sido equipados por un técnico del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente con emisores GPS/GSM y satelital, más un emisor terrestre acoplado o incorporado. Estos dispositivos son financiados por Red Eléctrica de España mediante un convenio de colaboración con GREFA, asociación que está desarrollando una intensa línea de trabajo para conseguir los emisores y promover el seguimiento de las aves marcadas, que portan además anillas oficiales y de lectura a distancia. Para una identificación en vuelo se les realizó también decoloraciones de plumas.

Una veterinaria de GREFA examina los ojos de uno de los buitres negros marcados en Alinyá.Una veterinaria de GREFA examina los ojos de uno de los buitres negros marcados en Alinyá. A toda máquina durante el marcaje de buitres negros en Alinyá: mientras un equipo realizaba los controles sanitarios y toma de muestras pertinentes a las aves, otro les colacaba los emisores GPS.A toda máquina durante el marcaje de buitres negros en Alinyá: mientras un equipo realizaba los controles sanitarios y toma de muestras pertinentes a las aves, otro les colacaba los emisores GPS.

Completo chequeo veterinario

Con el primero de los buitres negros marcados en Alinyà, en el momento de colocarle el emisor GPS.Con el primero de los buitres negros marcados en Alinyà, en el momento de colocarle el emisor GPS.El mismo día del marcaje se llevó a cabo un chequeo completo de los ejemplares, efectuado por una veterinaria de GREFA experta en fauna salvaje, algo imprescindible para comprobar que los buitres negros estén en condiciones óptimas cuando dentro de unos días se abra el jaulón de aclimatación. Estas aves han nacido hace uno o dos años, por lo que debido a su inexperiencia les costará remontar el vuelo y encontrar los primeros recursos tróficos disponibles una vez se realice la suelta definitiva.

Un seguimiento intenso de sus movimientos cuando vuelen libres, así como los aportes de comida cotidianos que se les proporcione desde el proyecto harán posible su adaptación al medio natural una vez que empiecen a orientarse por el Prepirineo catalán, primer paso para integrarse a la colonia de buitre negro de Boumort-Alinyà. Esta población ya cuenta 47 individuos residentes, de los cuales la mitad están fijados, con 12 parejas (10 de ellas reproductoras).

Colaboración en varios frentes

La jornada de marcaje y comprobación sanitaria finalizó por la tarde justo antes de que el agua de la lluvia, persistente esos días, volviera a caer sobre nosotros y los buitres negros recién marcados. En los próximos días, en cuanto las aves recuperen algo de tranquilidad y peso, con condiciones óptimas para la vida en la naturaleza, serán liberadas definitivamente.

El proyecto de reintroducción del buitre negro en los Pirineos está promovido por la Generalitat de Catalunya (a través del Departament d'Agricultura, Ramaderia, Pesca i Alimentació y el Departament de Territori i Sostenibilitat) y Fundació Catalunya–La Pedrera. GREFA y Trenca participan en el asesoramiento y la ejecución del proyecto, junto con el personal del Espai Natura Muntanya d'Alinyà y de la Reserva Nacional de Caza de Boumort. La Obra Social “La Caixa” (vía convenio con la Generalitat de Catalunya) y REE participan de manera destacada en la financiación del proyecto.