Las cuatro águilas-azor que permanecían en su nido artificial en el suroeste de la Comunidad de Madrid, han pasado de sus prácticas de vuelo diarias en la plataforma-nido a sus primeros vuelos comunales.
Las cuatro suelen volar no muy lejos las unas de las otras, lo que facilita la adaptación al terreno y la defensa del territorio. Aunque no dominan todas las técnicas de vuelo, si observamos que se manejan con cierta destreza en el aire.
Ahora, como en el resto de los programas con águilas, intentaremos incentivarlas para que permanezcan en esta zona el mayor tiempo posible, ya que cuanto más tiempo dependan positivamente del territorio donde están, más fácil es que regresen después de su primera dispersión. A esto puede contribuir el alto número de ejemplares liberados, ya que como en el caso del águila real en Galicia, estas interaccionan con intensidad y durante más tiempo.
El dia 15 de Mayo DM16 fúe la primera en saltar
Antes de volar practicaban en el nido artificial