Un buitre leonado en uno de los nidos ocupados por esta especie en la zona afectada por el incendio de Tierra de Pinares (Ávila).
Un buitre leonado en uno de los nidos ocupados por esta especie en la zona afectada por el incendio de Tierra de Pinares (Ávila).

Qué alegría nos ha dado el reciente hallazgo durante la actual temporada reproductora de tres parejas de buitre leonado con pollos en sus nidos, construidos en los pinares devastados por el incendio que asoló el pasado verano la comarca de Tierra de Pinares, en la provincia de Ávila. Este hecho nos ilustra sobre cómo la fauna salvaje lucha por su supervivencia haciendo frente a las condiciones más desfavorables.

Hace unos días un incendio forestal en las comarcas extremeñas de Hurdes y Sierra de Gata ha destruido más de 12.000 hectáreas, afectando gravemente, en plena época de reproducción, a una colonia de buitres negro donde hemos marcado y seguido con emisores a un buen número de buitres negros. La tristeza e impotencia en la que nos ha sumido esta noticia ha sido aliviada por un reciente hallazgo, en esta ocasión relacionado con el incendio forestal que en el verano de 2022 arrasó más de 4.000 hectáreas de Tierra de Pinares.

En esa ocasión, el fuego también acabó con la vida de muchos animales, entre ellos tres buitres negros que acabábamos de marcar con GPS. Al cabo de casi un año volvíamos a aquel horrible escenario, donde a primera vista todo seguía igual de devastado que cuando lo vimos recién extinguido el fuego. Sin embargo, algo había cambiado.

La misma fotografía que abre esta noticia, pero sin recortar, lo que permite ver el entorno incendiado donde se sitúa el nido.La misma fotografía que abre esta noticia, pero sin recortar, lo que permite ver el entorno incendiado donde se sitúa el nido.

En nuestra visita al lugar el pasado 22 de mayo hicimos un descubrimiento sorprendente e ilusionante. Apenas podíamos creer lo que teníamos ante los ojos: tres parejas de buitre leonado habían decidido desafiar ese medio tan hostil y reconstruir sus nidos, posiblemente los restos de algunos de buitre negro en mitad del bosque arrasado. Algunos de ellos se han aferrado al único vestigio verde que a duras penas consiguió sobrevivir en lo alto de la copa de algún pino, una aislada nota de color en cientos de metros a la redonda.

Como pudimos comprobar en GREFA, durante el seguimiento de varias colonias de buitre negro en la zona centro peninsular, los buitre leonados llegan a criar en en nidos de la primera especie cuyas parejas terminan construyendo otros. Estos nidos de buitre leonado que descubrimos en la zona quemada estaban tan expuestos que decidimos observarlos a mucha distancia para no causarles molestias, pero aun así pudimos comprobar que al menos en dos de ellos un pollo con pocos días de vida hacía sus primeros y torpes movimientos bajo la atenta mirada de sus padres.

Avanzadilla de intrépidos pioneros

Esos pollos en mitad del paisaje calcinado son la viva imagen de la desolación, pero al mismo tiempo también de la esperanza. Son la prueba de que detrás de esta avanzadilla de intrépidos pioneros terminarán viniendo otros y que con mucho esfuerzo y con el paso de años o décadas un paisaje devastado como este algún día volverá a ser lo que fue.

En cuanto a nosotros, a pesar de que trabajamos a diario con fauna silvestre, no deja de sorprendernos y admirarnos su instinto de supervivencia. Aunque ellos ni siquiera lo sospechen, estos audaces buitres leonados y sus pollitos nos han dado una enorme alegría. ¡Larga vida para estos valientes!

Panorámica y detalle de otro de los nidos de buitre leonado ocupado en los pinares devastados por el fuego.Panorámica y detalle de otro de los nidos de buitre leonado ocupado en los pinares devastados por el fuego.

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'Quercus' difunde la muerte por incendios de buitres negros marcados con GPS por GREFA

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