13 de febrero de 2023 / Hoy te queremos contar la historia de “Escobalón”, un buitre negro nacido en 2009 en Valdemaqueda (Comunidad de Madrid). Catorce años después, el emisor GPS con el que fue marcado sigue proporcionándonos valiosos datos acerca de su evolución en el medio natural. Esta información es de gran importancia para el Proyecto Monachus de GREFA, que tiene como objetivo la recuperación del buitre negro en la Península Ibérica y Europa.
“Escobalón” ha sido un buitre negro muy viajero durante sus primeros años de vida, como corresponde a la fase de dispersión juvenil. En la primavera de 2010, un año después de abandonar el nido, inició un periplo por la mitad norte de la Península ibérica que le llevó, entre otros lugares, hasta los Pirineos y cerca de la Sierra de la Demanda, como si quisiera confirmarnos la buena elección de las dos zonas de montaña donde hemos trabajado para crear nuevas colonias de buitre negro. Cuatro años después, se asentó en el abulense Valle de Iruelas, donde consiguió criar con éxito tras un primer intento infructuoso.
Marcaje con GPS de "Escobalón" en 2009, hace nada menos que catorce años.
El GPS que porta “Escobalón” nos indica que este intrépido buitre negro, desde su territorio en el Valle de Iruelas, realiza vuelos por el centro peninsular en busca de alimento, desplazándose para ello con frecuencia el sur de la Comunidad de Madrid. También visita el vertedero de Urraca-Miguel (Ávila), donde precisamente en el año 2021 localizamos a varios buitres negros que ya habían perdido su emisor, entre ellos a “Balona”, la hermana pequeña de “Escobalón”.
En 2015, “Escobalon” pasó a formar parte de "Centinelas del Veneno", un proyecto impulsado por WWF España y GREFA , ya que la información aportada gracias a su GPS es muy relevante para combatir el problema de los cebos envenenados y otros tóxicos que afectan a las rapaces carroñeras.
A fecha de hoy "Escobalón" sigue reproduciéndose cada año en su zona de cría y continúa informándonos puntualmente de su día a día. Hoy te hemos presentado la vida de “Escobalón”. Pero como el buitre negro, son muchas las especies amenazadas para cuya conservación trabajamos día a día desde GREFA.
